Top five (Directores de cine)

 Antes de que mañana se publique la primera ración de micro-relatos, que está siendo todo un éxito, cuelgo una entrada que llevaba tiempo queriendo poner y a la que no le había podido dedicar todo el tiempo que yo quería.

 Un buen top five debe tener su parte unánime, la que todo el mundo incluiría sin ninguna duda; su toque polémico para darle chicha al asunto, y su extravagancia para distinguirlo del resto, porque al fin y al cabo un top five es una excusa para hablar de cine. Ahí va mi top five de directores de cine, de lo más formal a lo más estrambótico.

 John Ford (el clásico): no solo por ser el mayor artesano del cine americano, el que elevó el western a su máxima esencia y lo llevó a su crepúsculo, sino porque el cine cambió con él. Con Ford murió el western, lo que quedó fueron las últimas ascuas de un fuego extinguido. Más republicano que las cincuenta estrellas, evolucionó su estética desde La Diligencia hasta El hombre que mató a Liberty Valance, convirtiendo el cine, un trabajo industrial y colectivo, en el séptimo arte, dándole carisma y personalidad, haciendo sus películas reconocibles al instante. ¿Por qué está en mi top five? Porque aprenderás más cine viendo una película suya que leyendo cualquier libro o estudiando comunicación audiovisual.

  Stanley Kubrick (el cine como arte): cuando has visto la mayoría de sus películas llegas a la conclusión de que, o era un tipo con una personalidad complejísima e impenetrable, o estaba loco. En casi cincuenta años de carrera y con poco más de 15 películas realizadas, tocó casi todos los géneros; histórico, terror, bélico, comedia o drama. Cuando ves una película suya tienes la sensación de que te está retransmitiendo más de lo que ves a simple vista. Colocó el cine a la misma altura que a una ópera de Verdi, que a Hamlet, que a La divina comedia; utilizando las infinitas posibilidades que el medio le ofrecía. ¿Por qué está en mi top five? Porque explora los limites del cine y los sobrepasa, porque Barry Lyndon está rodada con luz natural, porque 2001 es, probablemente, la película más importante que se ha realizado nunca, y porque a pesar de trabajar en la industria, hizo lo que quiso.

 Martin Scorsese (empieza la polémica): es el director de cine más cinéfilo que hay actualmente, quitando a Tarantino que vive en otra dimensión, se podría decir que es un historiador, y así lo demuestran sus documentales sobre el cine americano y el cine italiano. En cada una de sus películas hay un homenaje al cine, entendiendo su filmografía como un paseo por la historia del propio medio. Nació en Nueva York en una familia de inmigrantes italianos. Estuvo en el seminario y le faltó un plis para convertirse en cura, hecho que le influenció de sobremanera en sus obsesiones, la culpa, la redención, la salvación. Es el heredero del cine negro y de mafias del clásico americano, llevándolo a temas más universales, creando un universo de personajes reales e inolvidables. Maestro en el biopic, una excusa para tratar los temas que le interesan, queda la incógnita de si su elegante estilo es cosa propia o de su inseparable montadora Thelma Schoonmaker. De la generación de los setenta, en mi opinión, es el que mejor se ha mantenido y el que más ha guardado su personalidad, a pesar de que sus últimas películas no estén a la altura de sus primeras. Toro Salvaje y Godfellas son, para mí, sus mejores películas. ¿Por qué esta en mi top ten? Porque supo dirigir a Robert de Niro como ninguno, porque sus películas son el reflejo de la norteamérica de los últimos cien años, por la valentía que tiene hacer La pasión de Cristo. Algunos dirán que siempre repite los mismos temas, a mi me parece uno de los directores más inteligentes que existen a pesar de que se lo tenga creído últimamente.

 Woody Allen (cuando el top five pierde credibilidad) aquí es cuando esto empieza a tornarse un poco, mucho, incomprensible. El gracioso de Brooklyn es una de las personalidades más complejas del cine actual, a pesar de que tenga sus tropezones, es bien conocida la frase "una mala de Allen vale mil más que una buena de cualquier otro" . También es cierto que el tipo tiene un par de cojones al hacer una película al año desde hace ya más de treinta, muchos dirán que se repite, pero a mí no se me parece ninguna de sus películas. Son sus películas las que más me han conmovido y me han afectado como espectador, y sin ninguna duda como fuente de inspiración. Su amor por el cine es casi irracional, además el tipo no hace más que desprestigiarse y echarse mierda encima, comparándose a la baja constantemente con sus amados Fellini y Bergman. Creo a ciencia cierta que cuando ya no esté entre nosotros se le empezará a estimar como se merece, sino al tiempo. ¿Por qué está en mi top five? Por Annie Hall, Manhattan, Hannah y sus hermanas, Delitos y faltas, La rosa púrpura, Desmontando a Harry, Balas sobre Broadway, Match Point.

 David Cronenberg (el toque irracional, extravagente y estrambótico de mi top five) más de uno que me conoce habrá adivinado este sin dudarlo. La verdad es que viendo las películas de este tío me lo paso como un enano. El tipo es retorcido, enfermizo, polémico, surrealista, muy inteligente y además canadiense; sus primeras películas son un despiporre, el tio está obsesionao con la transformación del cuerpo humano y lo enfermizo de la sociedad actual. Pienso en Cronenberg y pienso en Jeff Godblum convertido en mosca, en James Wood follándose a una tele, en Vigo Mortensen peleando a muerte en una sauna, en la escena del auto lavado de Crash (díos Crash todavía me estoy recuperando de esa película) las cabezas explotando de Scanners. No sé, tiene sus tropiezos grandes y gordos, no estará a la altura de los anteriores, pero ver sus películas es una experiencia para mí. Sus últimas obras tienen un grado de madurez bastante tremendo, su última película es, como diría un colega, una puta obra maestra. Para mí Inseparables es su mejor película, con su puesta en escena sombría y elegante, en la que parece que en cualquier momento se va armar la gorda, y se arma.

 Este es mi top five, y lo sé, lo más seguro es que no tenga sentido no meter a Bergman, Fellini, Rosellini, Trauffaut, Godard, Houston, Buñuel, Wilder, Coppola, Chaplin, Kurosawa, Welles, Hitchcock, Lean, Lynch, Cassavetes, Spielberg, Haneke y muchísimos más, pero no os preocupéis porque no tengo na en contra de ellos, es más la mayoría me gusta tanto o más que los que están arriba.